¡Guijarros por todas partes!

 Bueno, algunos días son más locos que otros. Hoy salí con mis chicos a caminar y a jugar. Paramos en un parque infantil y los niños jugaron durante aproximadamente media hora. Luego continuamos hacia casa. Decidimos pasar por la residencia de ancianos para que los niños pudieran ver un rato a su mamá en su trabajo. Cuando le quité los zapatos , arena y guijarros cayeron por todo el suelo. Luego salió corriendo y se esparció más arena por todos los pasillos. Barrí todo. Luego se les dieron vasos con agua para beber. Luego uno de los chicos golpeó accidentalmente su vaso en el suelo y el agua derramó por todos lados. Fregamos el piso juntos. Luego los niños se despidieron de su mamá y nos fuimos a casa. Pero cuando entramos a casa y comencé a cambiguiarle el pañal al niño, aún había más arena y guijarros esparcidos por todo el sofá y el piso que había estado escondido dentro del pañal. Absolutamente asombroso.

Una semana variada

La semana fue muy variada y surgieron varios problemas inesperados. Por ejemplo, iba a empezar a ahorrar dinero. Pero de repente el televisor se estropeó. Entonces la batería de mi celular se agotó. Luego se rompió el lavabo del baño. Entonces noté que las suelas de mis zapatos se habían desgastado. También tuve que comprar neumáticos de verano nuevos para el coche la semana pasada y no tengo neumáticos de invierno para el otoño. ¡Buena suerte ahorrando!

Decidí conducir hasta Reykjavík para comprar un fregadero nuevo. Pero luego tuve un problema en el camino desde Hólmavík porque uno de los neumáticos empezó a perder aire muy rápidamente. Tuve que cambiar el neumático en el desierto. Por suerte tenía rueda de repuesto y pude conducir hasta el final del camino. ¡Probablemente me vea obligado a gastar mucho dinero en la ciudad, al contrario de lo que había decidido!